SOBERANIA EN MALVINAS
Por el Prof. Dr. Rolando Alberto Quintana
La flota Española comandada por Hernando de Magallanes, con uno de sus pilotos Esteban Gómez
1, el 31 de marzo de 1520 llega al puerto de San Julián para establecer los cuarteles de invierno. Luego de una serie de motines y ejecuciones Esteban Gómez desertó del estrecho de Magallanes, con la nave "San Antonio" y en su regreso a España avistó al conjunto de islas que conforman el rchipiélago de Malvinas y las incorporó al mapa dentro de los dominios Españoles con el nombre de Isla de “San Anton”, y al llegar a España Gómez, fue sometido a proceso el 6 de mayo de 1521.
2 El 24 de agosto de 1520 Magallanes dispone la partida y fue el primer navegante que visitó las islas Malvinas en octubre de 1520.3 Magallanes bautizó a Malvinas con el nombre de Sansón por encontrar allí aborígenes de gran altura.4 En 1527 el cartógrafo Diego Rivera incorpora las Islas Malvinas al imperio español realizando el primer mapa de dominios bajo el nombre de “La Carta
Universal” que más tarde las islas serían incorporadas en innumerables mapas como pertenecientes a España. En 1567 Francia ratifica la soberanía de las Islas a España y mediante el “Tratado de América” de 1670 firmado entre España e Inglaterra, SMB reconoce la soberanía española y lo ratifica con el “Tratado de Utrecht”. En 1764 los Ingleses confiaron el comando de la fragata “Dolphin” que, acompañada por la corbeta “Tamar” se dirigían, decían como ardid,5 a las
1 Reconocido cartógrafo y explorador portugués que navegó al servicio de la Corona española.
2 En su defensa el propio Gómez relato que: “… situados a 300 millas del Estrecho, divisan un
grupo de islas "jamás vistas" bautizándolas con el nombre de San Antón, dibujándolas en un
mapa” que recogería luego el cartógrafo Reinell en 1523. 3 El cosmógrafo Alonso de Santa Cruz relató, en su "Islario" de 1541, que las naves de Magallanes al dejar ese puerto "tomaron su demanda por la costa adelante, habiendo allegado y descubierto unas islas que están al Oriente del puerto de San Julián por dieciocho leguas que pusieron nombre islas de Sansón y de los Patos, porque en ellas hallaron mucho... Y están cincuenta y un grados de altura". Es de destacar que las Islas Malvinas están ubicadas entre los paralelos 50º 40` y 51º. 4 Cronista Santa Cruz testimonió: "…alcanzó uno de sus navíos sobre una gran pena, se salvaron tlos que en él iban, otro se metió en alta mar, y una carabela, procurando buscar abrigo hacia la tierra que parecía llena de montes nevados...", refiriéndose a las Islas Malvinas. 5 Documentos ingleses confiesan a Blind: “…para ocultar el verdadero fin del viaje consistente en una exploración clandestina en los mares del sur y la reanudación del programa del Almirante
Indias Orientales. Mientras que Francia invade puerto San Louis y bautiza con el nombre de “Malouinas”. El 14 de enero de 1765 llegaron a la isleta Sedge para luego llegar a Puerto Egmont, bautizado así en honor al primer lord del Almirantazgo y colocaron el pabellón inglés y en abril de 1767 es ocupada simultáneamente por los franceses denominándolo “Port de la Croisade”.
Advertidas las autoridades españolas de la ocupación clandestina de ingleses y franceses en 1770 expulsa a los ingleses6 y franceses.7 En 1790 se firma el en España el “Tratado de San Lorenzo de Escorial” entre Inglaterra y España referente a los asentamientos coloniales en la costa noroeste de América reafirmando la soberanía de España en las Islas Malvinas. El tratado comercial entre Inglaterra y las Provincias Unidas que se firmó el 2 de febrero de 1825 y ratificado por Inglaterra en mayo de ese año, reconoce la soberanía argentina de las Islas Malvinas ya que SMB no hace
reserva alguna. Otro de los rasgos interesantes del tratado sería la sorprendente simetría planteada por el mismo, que contrasta notablemente con la asimetría de su equivalente entre Brasil y Gran Bretaña, aunque como señala Vicente Sierra -y como observara el cónsul norteamericano en Buenos
Aires, molesto por el tratado con Inglaterra debido a que su país había otorgado el reconocimiento sin imponer condiciones y ahora quedaba en desventaja-la capacidad de la economía argentina en ese momento hacía que tal simetría fuera completamente inoperante quedaron sentadas las bases
jurídicas duraderas para el intercambio comercial entre ambos Estados.8 El 10 de junio de 1829 el Gobierno de Buenos Aires dictó un Decreto que dice: “Cuando la Gloriosa Revolución del 25 de mayo de 1810, se separaron Anson que establecía la necesidad de encontrar un fondeadero bien provisto en las islas Falkland (Malvinas), para los navíos que se proponían doblar el cabo de Hornos”. 6 El conflicto con Inglaterra llego a punto tal que parecía que la guerra era inevitable, ambos estados se armaron, y el 10 de junio de 1770 se forma un documento que establece: “… el
compromiso de S. M. Católica de restituir a S. M. Británica la posesión del Fuerte y Puerto llamado
Egmont no puede ni debe en manera alguna afectar la cuestión de derecho anterior de soberanía de
las islas Malvinas, de otro modo llamadas Falkland”. 7 Francia cede a España la colonia de Bougainville, si bien el gobierno español se mostró inflexible acerca del derecho de posesión de las islas, admitió un arreglo equitativo consistente en el reembolso de los gastos de instalaciones y material estimado en 603.000 libras, que fue pagada parte en Paris y parte en Buenos Aires. Dice Bougainville en su viaje: “España revindicó esas islas como dependiente del continente de la América meridional, y habiendo sido reconocido su derecho por el Rey, recibí orden de ir a entregar nuestro establecimiento a los españoles y de dirigirme después a las Indias Orientales atravesando el Mar del Sur entre los trópicos”. 8 Vicente D. Sierra, op. cit., t. VII, 1976, pp. 432-433 estas provincias de la dominación de España, ésta tenía la posesión material de las Islas Malvinas y de todas las demás que rodeaban al Cabo de Hornos, por la adyacencia de estas islas al continente que formaban el Virreinato de Buenos Aires, el Gobierno de la Republica entra en sucesión de todos los
derechos que tenía sobre estas tierras España, a pasar de que las circunstancias no han permitido hasta ahora darle la atención y cuidados que su importancia exige. A partir de 1811 fue abandonado el establecimiento español y (…) Esta zona era utilizada por los pesqueros y balleneros de distintas naciones…” Este decreto estableció un Comandante Político Militar con residencia en la Isla Soledad y con jurisdicción en las Islas Malvinas e Islas adyacentes al Cabo de Hornos, a fin de hacer cumplir a la población de las Islas, más de 200 habitantes, las Leyes de la República y cuidará en sus costas
la ejecución de los reglamentos de la pesca de anfibios. Por ese entonces los ingleses habían iniciado la Colonización de Australia y Tasmania, resultando una base muy importante las Islas Malvinas para el descenso de tripulantes y reparación de los barcos. En 2/01/1831 el Puerto Soledad fue atacado por la Fragata norteamericana Lexington, en represalia por las prohibiciones del Comandante
Vernet sobre caza y pesca, fracasando el intento yanqui. El 02/01/1833 el comandante Pinedo sufre un ataque Ingles proveniente de la Fragata Clío, quienes procedieron por la fuerza a desalojar a las
autoridades argentinas usurpándolas en nombre del rey británico, permaneciendo hasta la fecha.
El gobierno de Juárez Celman recibió de la administración anterior una negociación en trámite con Inglaterra sobre las islas Malvinas. El ministro británico Monson había iniciado en diciembre de 1884 un reclamo antelas noticias periodísticas según las cuales, con una subvención del Congreso, el
Instituto Geográfico Argentino preparaba un mapa de la República que incluía las Malvinas dentro del territorio nacional. El gobierno argentino urgió al británico para que respondiera al memorando del 2 de enero de 1885 encargado por Roca a través de una nota del canciller Quirno Costa en Marzo de 1887, pero el gobierno británico seguía sosteniendo que el debate había concluido en 1842. En enero de 1888, Quirno insistía en reabrir la discusión pero chocaba contra una nueva negativa
inglesa.9 En el año 1985 se han construido bases militares inglesas en Malvinas, no puede explicarse sólo como consecuencia de la guerra de 1982 la misma obedece a un plan estratégico de dominación de EEUU sobre América Latina llamado “Free Ocean Plan” que significa “Plan para el Océano Libre” que fue recrudecido mediante un documento aprobado en 1980 por el Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos donde se explica la importancia estratégica del Atlántico Sur y la necesidad de una acción combinada de las flotas de EEUU y sus aliados de la OTAN para el control de los espacios marítimos, señalando a Inglaterra como el principal de sus aliados, justamente
por su ocupación de los archipiélagos de Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur, por ello Ronald Reagan no dudó en apoyar a Inglaterra en la guerra de Malvinas contra la Argentina, a pesar de que, en virtud del “Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR)”, debía haberla defendido
frente a una agresión extra continental. La Base Militar es conocida como de “Mount Pleasant”, inaugurada en 1986,10 ubicada a 60 kilómetros de Puerto Argentino, y a 700 Km. de la costa
patagónica, ocupa la región más llana de la isla Soledad, cercana al mar y apta para el desplazamiento de aviones y helicópteros, cuenta con una red de avenidas que comunica las distintas instalaciones: cuarteles, hangares, campos de operaciones, la base aérea posee dos amplias pistas, una de 2.590
metros y otra de 1.525 metros, aptas para el aterrizaje y despegue de aviones de gran porte y dos barrios, uno para los 1.500 militares británicos y otro para los 500 civiles británicos, que operan de modo permanente, un complejo con cines y bares, y el aeropuerto de las islas que también está dentro de la base, también poseen silos ,para almacenar armas nucleares e instalaciones con 9 Bonifacio del Carril, Las Islas Malvinas, Bs. As. 1992. 10 En forma ilegal ya que La Resolución de la Asamblea General de la ONU, aprobada el 27 de octubre de 1986, dice puntualmente en su párrafo 3º: “exhorta a todos los Estados de todas las demás regiones, en especial a los Estados militarmente importantes, a que respeten escrupulosamente la región del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación, en particular mediante la reducción y eventual eliminación de su presencia militar en dicha región, la no
introducción de armas nucleares o de otras armas de destrucción masiva y la no extensión a la región de rivalidades y conflictos que le sean ajenas”. capacidad para albergar varios miles de efectivos militares y rampas para el lanzamiento de armas nucleares. La población civil total sin incluir los que pertenecen a la base alcanza a 2.800 personas, lo que demuestra que por cada civil habitante de la isla hay un efectivo militar. En el complejo existe una estación naval de aguas profundas llamada “Mare Harbour” frecuentada por la flota de la “Royal Navy”, que patrulla el Atlántico Sur, donde atracan submarinos atómicos, con un equipamiento militar similar a los efectivos británicos que tienen en Irak y Afganistán, utilizados en maniobras conjuntas o para la conexión con la red de bases militares de Estados Unidos y la OTAN. Para el funcionamiento y mantenimiento de dicha base demanda al Reino Unido alrededor de 150 millones de dólares anuales. Un costo no demasiado alto si se tiene en cuenta el declarado objetivo de “proveer seguridad en los territorios de ultramar en el Atlántico Sur” y un negocio redondo para la Corona, con las enormes ganancias que obtiene de la ilegal adjudicación de licencias de pesca y explotación de otros recursos naturales de la zona. Un dato revelador de la importancia económica y geopolítica de las Islas, consignado por el diario El malvinense del 23 de enero de 2009, es que el 7% del presupuesto de la OTAN está destinado a las Malvinas. En febrero de 2009, “Mount Pleasant” aparece dentro de un informe de la Unión Europea sobre bases militares en sus territorios de ultramar. Dicho informe se emitió, a pedido del parlamento europeo, y se tituló “El estatus y la locación de las instalaciones militares de los Estados Miembros de la Unión Europea y su potencial rol para la política de seguridad y defensa europeas”. Allí, la base de Malvinas se presenta como elemento importante de la estrategia europea, tanto como centro de operaciones para proteger la soberanía del territorio de ultramar en que se ubica, como para proyectar poder sobre la región. Frente a ese documento hubo un reclamo público de la cancillería Argentina y, además, en la Cámara de Diputados de la Nación donde se presentó un Proyecto de Declaración (1689-D-2009) en el que se expresa preocupación por el Informe, señalando que la concepción que se refleja de Malvinas en el mismo “violentaría doblemente el principio de soberanía e integridad territorial reconocido por las Naciones Unidas (Resolución 1514): por un lado, se perpetúa la ocupación colonial británica, por otro se agregaría una instancia de control, influencia, proyección, por parte de un bloque político supranacional (Unión Europea) integrado a su vez por el Reino Unido”. Las bases e instalaciones militares extranjeras instaladas a lo largo y ancho de América Latina y el Caribe constituyen sin lugar a dudas un peligro para la paz en la región. Durante la reciente Cumbre de Jefes de Estado y cancilleres del ALBA que tuvo lugar en Caracas, el canciller argentino Héctor Timerman señaló que el conflicto entre Argentina y Gran Bretaña en torno a las Islas Malvinas “es presentado por Gran Bretaña como un problema militar porque envía tropas y
ha convertido a las Islas en una base militar en el Atlántico Sur”. La ONU reconoce que existe una ocupación colonial inglesa en las Islas Malvinas y que se trata de un problema de violación de la integridad territorial de un país soberano, situación a la que se debe poner fin mediante una
negociación pacífica entre ambas partes en conflicto, a lo cual se niega sistemáticamente la Corona Británica. Impulsar los procesos de integración regional que están llevando adelante los pueblos latinoamericanos resulta indispensable para enfrentar y derrotar la militarización y el avasallamiento de nuestras soberanías. El “uti possidetis juris, ita possideatis et 1810”, es un principio reconocido
por el derecho de gentes y proviene del latín que significa: así como poseías de acuerdo a derecho, continuarás poseyendo desde 1810, por tanto, indica que los nuevos Estados soberanos a partir del 25 de mayo de 1810 tienen los límites territoriales que correspondían a la “Jurisdicción española” respectiva en ese momento. Este Principio se utilizó históricamente para legitimar las conquistas
territoriales, vgr. fue aplicado por España y el Reino Unido al finalizar la guerra Nueva Granada o del Asiento en la zona del caribe que duró de 1739 a 1749 cuando se firmó el Tratado de Aquisgrán, donde se garantiza el “statu quo ante”. Más tarde, se utilizó en la anexión de Alsacia con Lorena por parte del imperio alemán en 1871. En 1992 se aplicó el principio del “uti possidetis” en la controversia sobre fronteras terrestres, insulares y marítimas en el caso “El Salvador c/Honduras:
Intervención de Nicaragua” de la I.C.J. y el más reciente aplicado dicho principio en controversias fronterizas fue en 2005 in re: Benin c/Níger.11 A nuestro territorio nacional le correspondía todo cuanto era jurisdicción del Virreinato del Río de la Plata, incluyendo cuatro vastos sectores que lo
integraban a saber: el Paraguay; las provincias del Alto Perú; la Banda Oriental; y las Malvinas e islas del Atlántico Sur, que continuaban integradas jurídica y políticamente al Gobierno de las Provincias Unidas de América del Sud. El reconocimiento del “uti possidetis juris” tubo aceptación general de los estados africanos, este principio se encuentra generalizado en la Corte Internacional de Justicia al decir en 1986: “Por consiguiente, el uti possidetis juris … es un principio de orden general lógicamente vinculado con esta forma de descolonización en cualquier lugar que se produzca”. 12
La Argentina ha perdido hasta el momento más de 3.400.000 Km. 2 de territorio, no debemos permitir que continúen con las Malvinas que son argentinas conforme al principio ya enunciado entre otras razones fácticas y jurídicas.
Prof. Dr. Rolando Alberto Quintana
11 Informe de la Corte Internacional de Justicia del 1 de agosto de 2004 al 31 de julio de 2005, de
Naciones Unidas, pág. 41. 12 Controversia fronteriza in re: Burkina Faso/República de Malí, Fallo I.C.J. Reports, 1986.
No hay comentarios:
Publicar un comentario